Farol antiguo de metal de carruaje tirado por caballos del s. XIX.
Habilitado para bombilla.
Estos faroles fueron el único alumbrado de los carruajes y coches de caballos hasta la llegada de la electricidad a los vehículos de carretera.
El mango está sin fijar, hay que soldarlo.
Alto: 43 cm
Ancho: 16 cm
Profundo: 17 cm
(una unidad disponible)